En proceso, página 271:
«estoy
solo sentado en la mesa de la cocina a las cuatro de la madrugada rodeado solo
de papel y bolígrafo de humo de tabaco y de efluvios de alcohol y sé seguro que
cuando termine de escribir estas líneas las borraré del ordenador no quiero que
mis hijas la lean las lean no quiero que ellas sepan que estoy solo solo precisamente
ahora cuando ya llevamos unos días en los que estamos rehaciendo nuestras vidas
no quiero que marta se sienta mal no quiero que marta conozca estas sensaciones
mías estas emociones tan negativas sí algo tendré que hacer lo sé es usted muy
amable de recordármelo porque es posible que aún viva algunos años más y cada
año no será mejor que el anterior pero tengo que hacer algo para que al menos
sea igual sea solo igual de malo y maldito que este con eso sería suficiente si
creyera en dios es eso lo que le pediría no mucho más nadie sabe casi nada de
mí de mi vida anterior a cuando conocí a marta y no importa si vivo lo
suficiente es posible que algún día lo escriba aunque creo que no va a ser esa
la situación estoy prácticamente convencido de que no va a ser así cuando en
realidad yo no soy el responsable de todo esto yo solo soy el relator de la
vida de marta y no me puedo responsabilizar de todo lo demás y de todos mis
remordimientos yo solo soy un contenedor de historias como diría el gran autor
japonés haruki murakami y los contenedores de historias y relatos de los demás
no servimos para nada porque cuando nos rompemos y siempre nos rompemos como
todos los contenedores cajas y cajones entonces las historias y los relatos y
también los cuentos quedan libres en el aire y vuelan a mucha velocidad y sin
rumbo definido y cada cual los puede interpretar o soñar como quiera aunque
vayan sin comas y parezca que no tienen ni pies ni cabeza como algo que acabo
de escribir en medio de mi delirio acerca del tal san josemari y el otro el
satanás ese que eso tal vez sea solo una pesadilla o mejor dicho es un delirio
y es muy peligroso incluir sueños en una narración como también dice murakami mejor
dicho es sumire quien se lo dice a murakami en sputnik mi amor y él la cree ciegamente y más si
esos sueños son fruto del delirio y eso jamás puede contener buenos pronósticos
aunque intentemos ponerle un poco de humor por chabacano que sea que lo es como
usted debe de haber juzgado si es que es una persona de buen juicio que lo es
ya lo sé y eso me reconforta porque si ha llegado hasta aquí dentro de esta
inconsistente y enloquecida narración es porque ha querido nadie le ha obligado
y algo está pasando por su corazón que le dice que no está mal seguir adelante
a pesar de los delirios del marido de marta que soy yo aunque no estoy
absolutamente seguro no puedo estarlo como no puedo estarlo de que el mar es
azul o de que el campo está lleno de bellas mariposas de colores que vuelan o
de que las personas se mueren y ya está o que se van a otra vida mejor eso no
se sabrá nunca y mis desvaríos cuasi filosóficos son solo pequeñas
especulaciones que seguramente no interesan a nadie ni siquiera a mí mismo que
eso es como debe de ser como el mar azul y las mariposas de colores y el cielo
claro o bien estrellado si es de noche y el flujo del amor cuando se está
enamorado o enamorada en medio de unos tiempos que no ofrecen ningún aliciente ni
garantía para eso ni para el frenesí o los movimientos inmoderados como ya se
ha explicado repetidamente a lo largo de estos folios especialmente en su
título que podría ser el que es o la historia de marta eso no importa porque las
personas con criterio como usted ya saben muy bien de qué es de lo que estamos
hablando llámese equis o sea una forma de hablar muy dialogante que no sabemos
a dónde conducirá si es que conduce a algún lado llámese también equis o a la
revolución a la guerra o a la muerte que de todo tiene que haber en este mundo
sea el mío o el suyo de usted que tiene todo el derecho del mundo a tener el
suyo propio como todas las personas sean mortales veniales o sean lo que sean»
Visita, si te apetece, mi página web: Josep Segui Dolz I autor
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